Hace tiempo, en el post de «Allá va la despedida» dije que se podía hacer otro de estrofas completas. Y en esas estoy.
Empiezo con una que siempre me ha hecho gracia. A mi y a todo perro pichichi que conozco.
Todas las efes tenía
la primer novia que tuve:
Francisca, fregona,
fea, flaca, floja y fría.
Pero hay más con tintes de humor, claro:
Asómate a la ventana
y echa medio cuerpo afuera;
y después el otro medio,
¡verás que zorrao te pegas!
—
Un fiscal me preguntó
que de qué me mantenía
y yo le dije: «del robo
¿de qué se mantiene usía?»
—
Amores yo tuve trece
y se me murieron doce
y el otro que me ha quedao
dice que no me conoce.
Jota segoviana vs jota aragonesa:
La Virgen de la Fuencisla
le dijo a la del Pilar:
«si tú eres aragonesa,
yo segoviana y con sal».
Pie Franco de Nieva
Vino blanco.
Uva verdejo. D.O. Rueda
Viñedos de Nieva (Segovia)
13%
Entre 8ºC y 10ºC
Personificando seres inanimados:
Estaban un «dos» y un «tres»
peleando todo el día:
el uno que era de noche,
el otro que era de día.
Ehm… picarescas varias:
Vengo de moler (moler, moler)
la de los molinos del medio,
duermo con la molinera (olé, olé, olé)
… no lo sabe el molinero,
que vengo de moler, morena.
—
Desde la iglesia venimos
corriendo más que volando
y en el camino me han dicho
que te estabas desnudando.
—
Servilletas y manteles,
y una niña fue a lavar
servilletas y manteles…
y se le metió una rana
por el «quítate y no enredes».
Experiencias de la vida:
Son la corriente del río
y tu amor cosas de un día:
que llega, pasa, se aleja
y ya no vuelve en la vida.
(Anda resalada, re-salero,
límpiate con mi pañuelo)
—
Es como un niño el amor enojado
cuerpo salado, déjate querer,
que ni aún haciéndole halagos
vuelve el cariño.
—
Todos los que cantan bien
se arriman a tu ventana
y yo como canto mal
ni me arrimo, ni me llaman.
—
Mi madre me lo decía
y yo que lo considero:
el que no tiene cabeza
no necesita sombrero.
—
Donde hay mozos hay fachenda,
donde hay mozas, alegría;
donde hay viejos setentones,
sermones todos los días.
—
La perdición de una casa:
una vieja y un candil;
la vieja por lo que gruñe
y el candil por lo que gasta.
—
A mi no me dejó nada
cuando se murió mi abuela,
a mi no me dejó nada,
y a mi hermano lo dejó
… asomado a la ventana.
—
Ahí tienes mi corazón,
que si lo vieras ahora
como los niños del limbo:
sin tener pena ni gloria.
Dedicadas al suegro:
Anda diciendo tu padre
que no le dejo dormir
… dentro de esa casa está
la que no me deja a mi,
y anda diciendo tu padre.
… y a la suegra:
Cuando paso por tu puerta
cojo pan y voy comiendo
pa’ que no diga tu madre
que de verde me mantengo.
—
Que quié una reina pa’ ti
anda diciendo tu madre
que quié una reina pa’ti…
anda, ve y dile a tu madre
que la reina está en Madrid.
Acabo con las bonitas… lo que viene a ser como terminar un post con piropos:
A tu puerta planté un guindo
y a tu ventana un cerezo:
por cada guinda un abrazo,
por cada cereza un beso.
—
Se me ha metido en la cabeza
que me he de morir dos veces
la una para cuando Dios lo quiera
… la otra cuando tú me dejes.
—
Despierta, niña, despierta,
de ese sueño tan profundo,
que tienes a la ventana
quien más te quiere en el mundo.
—
Todos se me han olvidado…
no sé qué cantar os cante,
solo tengo en la memoria
que eres un cielo estrellado.
—
No sé cómo no florecen
las tejas de tu tejado:
estando debajo de ellas
la primavera de mayo.
(¡Qué guapa vienes,
qué bien te pones
la cinta al pelo,
ramo de flores!)
—
Cuando cruzo el Acueducto
siempre me acuerdo del diablo
y recuerdo bien los besos
de tus labios encarnados.
—
Cuando sale mi serrana, sí,
sale el sol, sale el salero,
sale la gracia del mundo,
sale lo que yo más quiero,
cuando sale mi serrana, sí.
Otra: Serrana mía
Olé! Sí señor!
Y : Veinticinco mujeres cincuenta tetas
Y si son de marrana ciento cincuenta,
Ciento cincuenta niña, ciento cincuenta.
Veinticinco mujeres, cincuenta tetas.
Jajajajaa!!
Mira si he viajado yo,
que vengo de Miguelañez,
he pasado por la Armuña
¡y he visto a las chicas de Añe!
mira si he corrido mundo.
Zamarramala en alto
Valseca en vela
Valverde del majano la sal se queda,
La sal se queda niña, la sal se queda
Zamarramala en alto, Valseca en vela.
😉